CTM. Ud. 16- GESTIÓN DE LOS
RESIDUOS.
En
los sistemas naturales los desechos de unos son aprovechados por otros, pues
todo entra dentro del ciclo de la materia y el flujo de la energía. Sin
embargo, la actividad humana genera muchos residuos y el equilibrio se rompe. Hace
años esto no suponía un gran problema, los productos se utilizaban más y se
reutilizaban. Pero a finales del siglo XX se instala la cultura del usar y
tirar. Actualmente, el desarrollo sostenible en materia de residuos trata
de implantar la cultura de las tres ERRES:
Reducir, Reutilizar y Reciclar.
En este tema trataremos el origen,
los tipos y los efectos principales de los residuos, sobre todo los sólidos
urbanos, así como las medidas para minimizar su impacto y las alteraciones que
producen sobre el medio ambiente, los ecosistemas y el hombre.
1.- CONCEPTO DE RESIDUO.
Residuo es todo
material resultante de un proceso de fabricación, transformación, utilización,
consumo o limpieza, cuando su poseedor lo destina al abandono.
Otra
definición afirma que son productos que no poseen valor económico por la falta
de tecnología para su aprovechamiento o por la inexistencia de un mercado para
los productos a recuperar.
2.- TIPOS DE RESIDUOS.
Según su procedencia, encontramos:
Ø Del sector primario, residuos agrícolas, ganaderos y forestales:
restos de cultivos, estiércol y purines, restos de madera, etc.
Ø Del sector secundario (industria y
energía)
o
Residuos
industriales: inertes, asimilables a urbanos, tóxicos y
peligrosos.
o
Residuos
radiactivos de alta, media y baja actividad.
Ø Del sector terciario (servicios):
o
Sólidos
urbanos: domiciliarios (papel, materia orgánica, vidrio),
voluminosos (restos de muebles, electrodomésticos, coches), comerciales (envases,
botellas) y de construcción.
o
Residuos
sanitarios: asimilables a urbanos (papeles, restos de comida o envases),
biopeligrosos (productos contaminados, jeringuillas, vendas, gasas, etc.), residuos
químicos, residuos radiactivos y restos anatómicos.
2.1.- Residuos
sólidos urbanos (RSU).
Los
residuos sólidos urbanos (ahora Residuos Urbanos) son los generados por las actividades de las zonas urbanas: domicilios,
comercios, oficinas y servicios.
Tienen
una naturaleza muy heterogénea:
- Residuos
inertes: vidrios, escoria.
- Fermentables:
materia orgánica procedente de restos de alimentos.
- Combustibles:
papel, cartón, plásticos.
- Voluminosos:
sofás, muebles, lámparas, etc.
- Electrodomésticos:
frigoríficos, lavadoras, televisiones, radios, etc.
- Teléfonos móviles, baterías, neumáticos,
etc.
En
los países desarrollados, la producción de RSU varía de 0,95 a 1,5 Kg. por
habitante y día. En España es de 1,2 Kg. por habitante y día. En los países
subdesarrollados la generación de RSU es mucho menor.
2.1.1.-
Efectos de los RSU.
- Olores desagradables provocados por la
descomposición de la materia orgánica.
- Riesgos para la salud, pues al acumularse
favorecen la proliferación de ratas, moscas, que pueden ser portadoras de
enfermedades.
- Contaminación del suelo y del agua superficial
o subterránea (por lixiviados).
- Contaminación del aire por combustiones.
- Degradación del paisaje, disminución de su
calidad visual.
2.1.2.-
Gestión de los RSU: contenedores,
puntos limpios urbanos.
La gestión de los RSU comprende
todas las operaciones que se realizan desde que se generan los residuos hasta
su destino final más adecuado desde el punto de vista ambiental. Cada municipio
gestiona la recogida de los residuos de esta manera:
® Recogida
selectiva.-
La utilización de contenedores que recogen
separadamente el papel y el vidrio está cada vez más extendida y también se
están poniendo otros contenedores para plásticos, metal, pilas, etc. En las
comunidades más avanzadas en la gestión de los RSU, en cada domicilio se
recogen los distintos residuos en diferentes bolsas y se cuida especialmente
este trabajo previo del ciudadano separando los diferentes tipos de basura. En
esta fase hay que cuidar que no se produzcan roturas de las bolsas y
contenedores, colocación indebida, derrame de basuras por las cales, etc.
También se están diseñando camiones para la recogida y contenedores con
sistemas que facilitan la comodidad y la higiene en este trabajo.
® Recogida
general.- En aquellos sitios donde no hay recogida
selectiva, la basura es transportada a los vertederos o a las plantas de
selección y tratamiento.
® Plantas
de selección. En los vertederos más
avanzados, antes de tirar la basura general, pasa por una zona de selección en
la que, en parte manualmente y en parte con máquinas, se le retiran latas (con
sistemas magnéticos), cosas voluminosas, etc.
® Reciclaje
y recuperación de materiales. Lo ideal sería recuperar y
reutilizar la mayor parte de los RSU. Con el papel, telas, cartón se hace nueva
pasta de papel, lo que evita talar nuevos árboles. Con el vidrio se puede
fabricar nuevas botellas y envases sin necesidad de extraer más materias primas
y, sobre todo, con mucho menor gasto de energía. Los plásticos se separan,
porque algunos se pueden usar para fabricar nueva materia prima y otros para
construir objetos diversos.
® Puntos limpios: son instalaciones públicas para que los
consumidores depositen sus residuos domésticos peligrosos o voluminosos:
o
Desechos como aceites o pesticidas, pues son especialmente
nocivos para el agua.
o
Gases CFC y HCFC de antiguos frigoríficos, que
contribuyen a disminuir la capa de ozono.
o
Aparatos electrónicos, pilas o pinturas que
contienen metales pesados tóxicos como plomo, mercurio o cromo.
o
Productos
de origen petroquímico como disolventes, pinturas, pegamentos, etc., puesto que
pueden generar compuestos orgánicos volátiles (COVs) con efectos incluso
cancerígenos; etc.
Gracias a los puntos limpios se evita el impacto
ambiental de los vertidos incontrolados, y se contribuye a la reutilización y
reciclado de este tipo de residuos. Posteriormente, un camión transporta los
residuos para darles el final apropiado, ya sea reutilización, reciclado, valorización energética o eliminación de forma
segura.
2.2.- Residuos sanitarios.
Los residuos sanitarios son
generados por las actividades sanitarias en hospitales, clínicas, consultas de
atención primaria, laboratorios de análisis y laboratorios farmacéuticos.
Algunos de estos residuos son asimilables a los urbanos (se originan en las oficinas, cafeterías,
jardines) y no necesitan una gestión especial para su retirada, por lo que se
tratan igual que los RSU. Sin embargo, existen residuos biosanitarios peligrosos que pueden poseer agentes
infecciosos, por lo que se hace necesario desinfectarlos y separarlos en
distintos compartimentos antes de que sean recogidos por los servicios
municipales; o pueden contener sustancias químicas que hagan necesario reducir
su peligrosidad antes de ser desechados. Si existen residuos radiactivos
(aparatos de radioterapia, rayos X), la gestión la llevará a cabo ENRESA
(Empresa Nacional de Residuos Radiactivos).
2.3.- Residuos industriales.
Son materiales inertes, asimilables
a residuos urbanos y sustancias tóxicas, peligrosas o radiactivas, generados en
la actividad industrial. Los inertes y
los asimilables a residuos urbanos reciben el tratamiento normal, pero los
tóxicos y peligrosos merecen especial tratamiento.
2.3.1.-
Residuos tóxicos y peligrosos.
Son
aquellos que contienen sustancias como el arsénico, cadmio, biocidas u otros
compuestos en cantidades que suponen un riesgo tanto para la salud humana como
para el medio ambiente. Entre los efectos que pueden causar destacan las
alteraciones sobre la salud por ingestión o inhalación de los mismos y la
contaminación por contacto del suelo, las aguas superficiales y subterráneas.
Para tratar estos residuos existen
distintos métodos:
- Tratamientos
químicos: transforman las sustancias tóxicas en
otras menos dañinas (detoxificación). Se llevan a cabo mediante la
neutralización en reacciones de oxidación-reducción, o con mecanismos de
precipitación.
- Tratamientos
físico-químicos, que separan o aíslan los productos
peligrosos del resto, mediante ósmosis inversa, destilación, absorción por
calor, electrodiálisis, extracción con disolventes, etc.
- Tratamientos
térmicos, como combustión, gasificación y
cristalización.
- Aislamiento
en depósitos de seguridad, es decir, vertederos
localizados en terrenos “supuestamente seguros” y sometidos a controles
sanitarios.
2.4.- Residuos radiactivos.
Se
considera residuo radiactivo a todo aquel material o producto de desecho que
contiene elementos radiactivos en concentración o niveles de actividad superiores
a los establecidos legalmente.
Los
residuos radiactivos se clasifican atendiendo a su:
® Período de desintegración. Es el
tiempo que tarda la masa de un isótopo en reducirse a la mitad. Existen
residuos radiactivos de vida corta (< 30 años en reducirse a la mitad) y
otros de vida larga (> de 30 años).
® Actividad específica. Es el
número de desintegraciones nucleares por unidad de tiempo y masa. Se mide en
becquerelios, que equivalen a 1 desintegración/segundo.
® Intensidad de actividad. Los
residuos de alta actividad contienen emisores de larga vida y los de media y
baja actividad contienen emisores o de vida corta.
® Toxicidad. Refleja la cantidad de
radiaciones ionizantes que emiten los isótopos, que disminuye con el tiempo.
Las
fuentes de residuos radiactivos son las centrales nucleares, la industria, los
hospitales (medicina nuclear, radiodiagnóstico) y la investigación con isótopos
radiactivos.
Sus efectos están relacionados sobre
todo con alteraciones en la salud, con contaminación del mar por vertido de
residuos, etc.
2.5.- Residuos agrícolas,
ganaderos y forestales.
Se originan como consecuencia de la
agricultura, la ganadería y las actividades forestales. Dentro de los
agropecuarios, destacan los plaguicidas, los abonos, los insecticidas, los
restos agrícolas, los purines y los excrementos de animales. Los principales
productos forestales son ramas, hojas, cortezas, raíces, serrines, mantillo,
etc.
Todos estos residuos poseen un
elevado contenido en materia orgánica, por lo que se emplean como abonos o para elaboración de compost. También algunos se emplean
para obtener energía de la biomasa.
Su control es necesario para evitar
problemas de contaminación del suelo y del agua en caso de que sean vertidos a
ellos, y para evitar incendios.
3.- GESTIÓN DE LOS RESIDUOS.
La gestión de residuos debe
contemplar los mecanismos de recogida, las técnicas de eliminación, los
tratamientos de los residuos generados y el almacenamiento de los residuos
especiales en lugares adecuados y seguros.
La actuación más extendida en
materia de residuos es la de situarlos en vertederos controlados o la de
incinerarlos. En la actualidad, la tendencia es aplicar la regla de de las tres erres: reducir
su producción en origen, reutilizar
todos aquellos residuos aprovechables y reciclar
todos los materiales que sea posible. Para poder aplicar esta medida es
fundamental la recogida selectiva de residuos, separando selectivamente con
anterioridad los mismos en el propio domicilio y depositándose en contenedores
específicos para cada tipo de residuo.
3.1.- Disminución
de los residuos.
Para disminuir o evitar la formación
de productos de desecho se recurre a técnicas de minimización de residuos, que
son:
a)
Reducción
en origen. Trata de eliminar la producción de residuos
empleando “tecnologías limpias” que supongan menores impactos ambientales.
b)
Reducción
de volumen. Consiste por un lado en la “separación de los
residuos en origen”, ya que algunos se pueden recuperar y reutilizar de nuevo,
y por otro lado, en la “reducción física de su volumen” aplicando tratamientos
como compresión, etc.
c)
Recuperación
y reciclaje. La recuperación consiste en emplear los
residuos en procesos de fabricación distintos a los de su formación; el reciclaje
consiste en su empleo para los mismos procesos en los que los residuos se han
producido.
3.2.- Transformación
de residuos.
La transformación de los componentes
de los residuos con el fin de obtener energía con otras aplicaciones es otra
forma de aprovechamiento de desechos. Un ejemplo es:
3.2.1.-
El compostaje.
El
compostaje consiste en la degradación
bioquímica de la materia orgánica de los residuos mediante la acción de
microorganismos (bacterias y hongos) presentes en los mismos hasta formar un
compuesto estable llamado “compost” o “humus”.
El
compostaje puede realizarse aerobia o anaerobiamente. La vía aerobia consta de:
- Etapa
de latencia y crecimiento, que dura 2-4 días, en la
que comienzan a crecer los microorganismos.
- Etapa
termófila de gran actividad bacteriana a 50-70º C,
que elimina gérmenes patógenos y estabiliza la materia orgánica. Dura más
tiempo, de semanas a meses.
- Etapa
de maduración. Aquí disminuye la actividad bacteriana y
se potencia la de los hongos, que siguen descomponiendo la materia
orgánica. Se fabrican vitaminas y antibióticos, entre otros compuestos.
El
compost se puede usar para abonar suelos, alimentar ganado, construir
carreteras, obtener combustibles, etc. Es fundamental que la materia orgánica
no llegue contaminada con sustancias tóxicas. Por ejemplo, es muy frecuente que
tenga exceso de metales tóxicos que hacen inútil al compost para usos
biológicos al ser muy difícil y cara su eliminación.
El
compost mejora las propiedades de los suelos al retener más agua, e incrementa
los procesos de nitrificación. La materia orgánica también puede ser empleada
para la fabricación de biogás y bioalcohol.
3.3.- Eliminación
de residuos.
La eliminación se aplica en aquellos
residuos que no son reciclados ni transformados en otros productos. Los más
importantes métodos de eliminación son los vertederos, la incineración y el
almacenamiento de residuos radiactivos.
3.3.1.-
Vertederos.
a)
Vertederos
incontrolados. Suelen ser zonas no alejadas de las
poblaciones donde el hombre ha depositado siempre los residuos generados, pues
es simple y barato. Estos vertederos generan graves problemas ambientales
(impacto paisajístico, mal olor, contaminación de agua, suelo y aire) y
problemas de salud (enfermedades transmitidas por ratas o insectos), pues
carecen de los controles adecuados.
b)
Vertederos controlados. Son
instalaciones de eliminación destinadas al depósito de residuos, pero situados
en lugares adecuados, donde se depositan de forma ordenada, segura y
supervisada, evitando problemas de contaminación.
Un
buen vertedero debe instalarse sobre terrenos impermeables y en pendiente para
recoger lixiviados, en zonas donde no llueva mucho y donde las Tªs sean altas;
deben instalarse salidas de gases y deben construirse accesos a vehículos,
además de vallarlo para impedir el paso de personas o animales.
Cuando
el vertedero alcanza su máxima capacidad, se clausura, sella y cierra,
acondicionando su superficie mediante reforestación y restaurando el paisaje de
la mejor manera posible, dándole otro uso a la zona. Ej.- un parque.
Ventajas
de los vertederos: costes reducidos, poco impacto ambiental si
está bien gestionado. Inconvenientes: se necesitan grandes superficies
de terreno alejado de poblaciones, y se producen lixiviados aún después de su
clausura.
3.3.2.-
Incineración.
Es un proceso de combustión térmica
controlada que provoca una oxidación del C y del H presentes en la materia
orgánica residual, obteniéndose cenizas, CO2 y H2O. Si en
las basuras existen plásticos de PVC, se producen además dioxinas y furanos.
Con
este mecanismo se consigue reducir el peso y volumen de las basuras sólidas en
poco tiempo y espacio. Es muy conveniente quitar algunos componentes de la basura antes de
incinerarlas. Uno de ellos es el vidrio porque si no, se funde y es difícil de
retirar del incinerador. Otro son los restos de los alimentos que contienen
demasiada humedad. Los materiales que mejor arden y más energía dan son el
papel, los plásticos y los neumáticos.
Los
materiales incombustibles, junto con las cenizas formadas, se recogen, analizan
y emplean para relleno en la construcción, o se solidifican y envían a
vertederos inertes o a depósitos de seguridad.
3.3.3.-
Almacenamiento de residuos
radiactivos.
Al no poder ser eliminados por los
procesos habituales, estos residuos deben ser almacenados en lugares especiales
con el fin de aislarlos del medio el tiempo suficiente para que desaparezca la
radiactividad que contienen.
Los residuos de baja y media
actividad se inmovilizan en depósitos de
hormigón, mientras que los de alta actividad pueden depositarse en emplazamientos temporales, como las piscinas
de las centrales nucleares, donde son enfriados un tiempo, y en emplazamientos definitivos, que son zonas bajo tierra.
En España, ENRESA se dedica a
almacenar residuos de baja y media actividad.
3.4.- La gestión
de los residuos en España.
Se
basa en las directrices que marca la Unión Europea, que están basadas en
actividades para:
I.
Reducir la producción de residuos empleando
tecnologías limpias.
II.
Fomentar el reciclado y la reutilización de los
residuos.
III.
Eliminar de manera segura los residuos no
aprovechables.
Las
líneas generales que sigue la Dirección
General de Política Ambiental en relación a los residuos son:
- Apoyo al reciclado y al sellado de
vertederos incontrolados.
- Elaboración de planes nacionales: PNRSU
(Plan Nacional de Residuos Sólidos Urbanos), PNRP (Plan Nacional de Residuos
Peligrosos), PNRI (Plan Nacional de Residuos Industriales)
- Elaboración
de leyes como la de Envases y Residuos,
que introduce la recogida selectiva de envases y los sistemas integrados de
gestión de residuos, prohibiendo el abandono, vertido o eliminación
incontrolada de los mismos en todo el territorio nacional.
No hay comentarios:
Publicar un comentario